Cualquier motor, para su correcto funcionamiento, necesita mantener una temperatura óptima de trabajo, donde la viscosidad del aceite sea la correcta, a la vez que los metales del motor no estén muy calientes, pudiendo quebrarse o doblarse.
Para controlar el alza de temperatura que provoca un motor en funcionamiento, es que existen los sistemas de refrigeración, los que pueden ser enfriados por líquido o por aire. El 99% de los vehículos, utilizan refrigeración líquida. Por aire algunas motos y el Volkswagen Escarabajo.
El radiador de un auto, en particular, es el receptáculo donde está el líquido refrigerante. Se ubica adelante en la parte frontal del auto y se ve más o menos como en la imagen.
El radiador comienza a funcionar cuando el motor toma algo de temperatura. Ahí la bomba de agua impulsa el líquido refrigerante por los conductos internos que lo transportan.
Una vez recorrido todo el motor, el líquido, que ha tomado temperatura, vuelve al radiador para volver a enfriarse y entrar nuevamente a los conductos.
¿Cómo se enfría? Gracias a su ubicación, el radiador recibe el viento frontal del auto, sobre todo en carretera. A la vez, un electroventilador ubicado detrás de él funciona para bajar la temperatura del líquido refrigerante.
Si el líquido no se enfriara, se calentaría al punto de evaporarse. Si alcanza los 100 °C se evaporará, dejando tu motor sin líquido refrigerante, calentándolo al punto de fundirse.
El correcto funcionamiento del sistema de enfriamiento del motor, lo puedes cotejar con lo que te muestra el marcador de temperatura. Es ideal que esté en la mitad o cerca.
También es importante que el motor no esté demasiado frío, puesto que un motor muy frío puede quebrar metales o sufrir daños mayores, por tener el lubricante a una temperatura muy baja para trabajar bien con la viscosidad adecuada.
¿Quieres un auto usado? Revisa todos sus antecedentes con el Informe Autofact.
La tapa del radiador tiene otras funciones además de tapar. La tapa es la “llave” para presurizar el sistema de enfriamiento. Una tapa de radiador incorrecta, puede no presurizar bien y hacer que el líquido se caliente hasta evaporarse.
CUIDADO. Nunca saques la tapa con el motor caliente. Todas las revisiones se hacen con el motor frío. Si te quedaste en pana, espera a que se enfríe el motor.
El sistema de refrigeración es fundamental para que funcione el motor de tu auto. Si funciona mal o no refrigera bien y no haces nada, tu motor tiene los días contados.
Entre las principales fallas que puedes experimentar existen las siguientes:
Los especialistas coinciden en que un radiador debería durar al menos 10 años. En autos de verdadera calidad, si haces todas las mantenciones preventivas y tratas bien al vehículo podría ser eterno.
Antes eran hechos de materiales más soldables, hoy traen hasta plástico, por lo que repararlo es más inviable que hace años atrás. Aunque algunas cosas menores sí son solucionables por un entendido; ya sea que esté tapado o con algún tipo de filtración.
Aquí hay un problema de espacio/tiempo. Como los radiadores pueden durar 10 años o más, es probable que tengas problemas para encontrar alguno original, puesto que podría estar discontinuado el modelo.
Así es. Hoy la industria avanza y los autos van innovando cada vez más rápido. Si encuentras un radiador original, perfecto.
En caso contrario, es bueno asegurarse, asesorarse e investigar bien sobre cuál radiador alternativo elegir y por qué. El material utilizado o respaldo de algún fabricante, pueden ser una buena señal.
¿Quieres un auto usado? Revisa todos sus antecedentes con el Informe Autofact.