Las bujías son las piezas que se encargan de encender la mezcla de aire y combustible en la cámara de combustión del motor. Esto se logra a través de una chispa, que se produce cuando la corriente eléctrica pasa a través de dos electrodos en el interior de la bujía.
La existencia de las bujías en los motores es fundamental, sin ellas no habría ninguna chispa que produzca la combustión en conjunto con la mezcla de aire y combustible.
Si bien son piezas baratas y fáciles de cambiar, hay que tener cuidado con cometer algunos errores evitables a la hora de reemplazarlas, a la vez que es bueno cambiarlas periódicamente para no dañar tu motor.
No todas las bujías son iguales y cada tipo de ella es mejor para un determinado tipo de motor. Al mismo tiempo, cada modelo de vehículo tiene asignado una bujía específica, que puede variar en marca, pero jamás en características.
Más allá del tipo de bujía, los cuales te mostraremos, tendrás que considerar el tipo de bujía que requiere el motor y la que especifica el fabricante que debes usar en tu auto.
En general, cada cilindro tiene a lo menos una bujía y ella produce la chispa en la cámara de combustión, para que por un tiempo de motor específico, se genere la chispa que haga la combustión con el aire y combustible en ese cilindro.
Este ciclo, ocurre en cada cilindro del motor en un tiempo de motor específico para un óptimo rendimiento, performance y salud del moto.
Revisa el historial mecánico y legal de un vehículo usado. Revisa sus revisiones técnicas, si ha sido chocado, permisos de circulación, kilometraje y deudas TAG, multas de tránsito y más
Las bujías se encargan de disipar calor al interior de la cámara, por lo que sus materiales deben ser malos conductores del calor, puesto que si fueran de acero, serían completamente incandescentes en un motor encendido.
Normalmente, están hechas de cobre, platino o iridio y aún llevan un recubrimiento cerámico en la parte donde está conectado el cable de bujía que viene desde la bobina.
En general, los tres tipos más comunes de bujías son: cobre, platino e iridio. Cada una de ellas funciona mejor para un determinado tipo de motor y eso te lo explicaremos a continuación...
Son las más comunes, corrientes y económicas de todas, pero duran menos y son menos resistentes a altas temperaturas.
Están compuestas por un núcleo de cobre y cubiertas por una aleación de níquel; siendo adecuadas para motores más antiguos,o de compresión menor.
Cuentan con un electrodo central que es de platino, haciéndolas más duraderas y rendidoras que las de cobre.
Desarrollan una conductividad eléctrica más eficiente y son más resistentes a altas temperaturas. Suelen recomendarse para motores modernos y/o de inyección directa de combustible.
Son las más pro; caras, eficientes y resistentes. Su electrodo central es de iridio, que es un metal bien duro que es altamente resistente al desgaste.
Por ello, genera por más tiempo una mejor chispa y más precisa, formando una mezcla más explosiva, que a la vez reduce el consumo, hace más eficiente y ágil el motor y produce emisiones más limpias.
Generalmente, son ideales para motores de alta performance, gran caballaje o turbo.
Por otro lado, existen dos grados térmicos en las bujías, los que tienen diferente capacidad para disipar el calor en la cámara de combustión.
Las bujías calientes, por su parte, tienen el aislador más largo, haciendo recorrer el calor de forma más indirecta. Este tipo de bujías es más característica de autos más antiguos, de baja cilindradas.
Las bujías calientes permiten que los motores más viejos mantengan una temperatura óptima de trabajo. Eso, obviamente, mientras el sistema de refrigeración del motor funcione como corresponde.
Las bujías frías, en tanto, tienen un aislador corto con un recorrido de calor directo, pensado para motores más potentes y que acostumbran también a andar por carreteras y autopistas, responden muy bien a altas velocidades.
Una bujía fría en motores más poderosos, ayudará a mantener la temperatura a raya, puesto que a grandes rpm y velocidades, se genera mayor calor que en motores de bajas prestaciones.
Como te dijimos al principio, cada motor tendrá una bujía determinada, que lo hará funcionar y además optimizará su rendimiento, performance y emisiones.
Si bien, un auto puede funcionar con otra bujía que encaje a la perfección en el hilo de la culata, podrías sentir el vehículo notoriamente más pesado, con tirones, lento y gastador. Sí o sí debes usar la bujía indicada para el motor de tu auto, punto.
Antiguamente, había porfiados que cambiaban las bujías solo cuando daba problemas; antes, por ningún motivo. Gran error, puesto que se obviaba una buena y recomendable mantención preventiva.
Lo correcto, es cambiarla cada 40 mil a 50 mil kilómetros, aunque hay algunos vehículos que indican realizar el cambio a mayor kilometraje, por ejemplo cada 100 mil kilómetros.
Además de elegir bien la bujía para tu auto, es bueno que tengas ciertas precauciones a la hora de instalarla, si decides hacerlo tú. Podría requerir solo una calibración, de eso ya te hablaremos.
Recuerda que si tu vehículo tiene garantía vigente, es recomendable hacer siempre todos los servicios en un concesionario o taller mecánico autorizado por la marca del auto.
Además del kilometraje que acusarán la necesidad de un cambio de bujías, hay algunos síntomas que podrían indicar que se requiere cambio de bujías del bólido.
Ojo, aunque falle una, siempre será mejor cambiarlas todas…
Si el motor está con un ralentí disparejo o se sienten tirones o cuetazos al andar, una opción es que el problema sea la calidad de la chispa, que no está haciendo buena combustión. Ahí, lo mejor será reemplazar; si el problema persiste, podrías necesitar comprar cables de bujía también.
Si el motor está pesado de arrancar o simplemente no parte, entonces las bujías podrían estar al final de su vida útil.
Si sientes el vehículo pesado, de respuesta lenta, si su performance cambió abruptamente, podrías tener las bujías en mal estado, con una chispa deficiente, entre otros problemas.
Normalmente, la pérdida de potencia y el andar irregular van a redundar en un mayor gasto de combustible. Podría ser que incluso está quedando combustible sin quemar, el que estaría siendo desperdiciado.
Todas estas fallas que te mostramos y también algunas otras, podrían también verse representadas en la propia bujía. Así es, dime cómo está la bujía y te diré que falla tienes dice el dicho; veamos:
Al retirar la bujía, si ves que el hilo está negro, cubierto de hollín, quiere decir que la mezcla está muy rica, es decir, con más combustible del que se necesita al momento de la combustión.
Esto puede ocurrir por un filtro de aire sucio, que no está dejando entrar el suficiente oxígeno para la mezcla con el carburante; también podría haber un problema con el sensor de oxígeno. Podría ser un inyector con problemas, o bien el carburador no está trabajando bien.
Con las bujías así, tendrás un mayor consumo de combustible, pérdida de potencia y mayores emisiones contaminantes.
Si las bujías están aceitosas, quiere decir que está llegando aceite de motor donde no debería haber. Así es, puesto que donde están las bujías, solo debería haber oxígeno y combustible, además de la chispa, claro.
Este problema podría ser serio, ya que no tiene que ver con el afinamiento del motor, que produce bujías negras. En este caso, podría haber problemas con los anillos o con las válvulas. Con las bujías aceitosas, es claro que el auto está quemando aceite: grave. Probablemente veas humo azul saliendo por el tubo de escape.
Si las bujías tienen el hilo blanco, como si tuvieran un glaseado, quiere decir que está entrando líquido refrigerante, o en su defecto humedad a la cámara de combustión.
Esto ocurre, porque podrías tener una empaquetadura de culata en mal estado, o peor aún tener roto el block del motor o la propia culata.
Si esto ocurre, tu motor podría sobrecalentarse, perder compresión y fundirse. Podrías ver humo blanco por el escape en medio de la marcha.
Ojo, a veces, por las mañanas podrías ver humo blanco cuando enciendes el auto, pero en ese caso es diferente. Si enciendes el auto por primera vez en el día en la mañana, en el tubo de escape podría haber humedad que se evapora con el calor del motor y lo ves en forma de humo blanco, que desaparecerá en pocos minutos.
En cambio, si el humo blanco sale cuando ya llevas un rato andando, es porque hay problemas y se está pasando el refrigerante a lugares inadecuados.
Si al retirar una bujía, ves un color gris o café; y a la están erosionadas, podrían haber cumplido su vida útil, necesitando ser reemplazadas inmediatamente.
El desgaste es propio del uso, aunque una buena mantención preventiva, pide reemplazo de bujías antes de llegar a este punto.
Eso sí, una temperatura demasiado alta en el motor o un combustible de mala calidad, podría producir la muerte prematura de las bujías. Sin dudas, que con las bujías así te será difícil hacer partir el auto, a la vez que sentirás tirones, cuetazos y otros defectos al andar.
Cualquier persona con la llave correcta puede reemplazar una bujía cuando quiera; o si necesita retirarla, revisarla y colocarla nuevamente. La cuestión es tener mucho cuidado, porque sin querer podrías arruinar tu motor.
Si bien reemplazar las bujías es sencillo, hay que tener máxima precaución con no rodar el hilo de la culata, si eso ocurre, estarás en problemas. ¿Cómo podría ocurrir esto? Si aprietas mucho la bujía, podrías romper el hilo, porque su material es más maleable y fácil de romper, o bien, si al instalar una bujía, entró chueca, podrías deformar el hilo original.
En cualquiera de estos casos, los problemas serán los siguientes:
Podría caer cascarria del aluminio de la culata, o del material que esté fabricada, a la cámara de combustión, pudiendo rayar pistones y camisas: Gravísimo
La bujía tenderá a salirse, ya que no vas a poder dar un buen apriete. Si no usas el auto, reemplazando la culata solucionas el problema, la cuestión es que no es barato. Hay que tener cuidado.
Para sacar una bujía o colocarla, debes tener cuidado al desenroscar y enroscar; y al mismo tiempo asegurarte siempre, que estás haciendo el movimiento recto y no chueco. Cuando instales la bujía, el hilo es suave, tanto que puedes apretarla con la mano, como si fuera la tapa de una Coca Cola. La llave la necesitarás para un leve apriete final, pero leve, si aprietas mucho, la puedes rodar.
Recuerda que cada motor utiliza bujías específicas para el modelo; procura siempre respetar estos estándares; los que encontrarás en el manual del fabricante o bien en internet.
La revisión y/o reemplazo de bujías debes hacerlo siempre con el motor frío y con la llave indicada, no inventes cosas “chasquilla”.
Al principio del post nos referimos al calibrado de bujías. Bueno, si estás revisando las bujías y no parece tener síntomas evidentes de desgaste, quizás están mal calibradas. En el manual del fabricante se especifica una distancia entre el electrodo y el extremo de la bujía. Regula esa distancia, un alicate puede ayudar, solo preocúpate de respetar ese espacio, que puedes medir como sale en la foto.
Durante años, las bujías Bosch fueron un referente en el sector de las bujías y el afinamiento en general, pero cuestiones de tendencia industrial las hizo inexplicablemente perder calidad. Hoy francamente no son lo mismo y los más tuercas lo saben.
En paralelo a la decaída en calidad de las bujías Bosch, fueron tomando cada vez más fuerza las bujías NGK, que son de origen japonés. Esta marca de bujías ha obtenido reconocimiento como la marca de piezas más admirada en Brasil, con el Premio Inova 2021, entre otros galardones.
En general, las marcas que dominan el mercado de bujías, además de las NGK, son las mencionadas Bosch, Denso y Champion.
La durabilidad, confiabilidad y eficacia de las NGK, pese a ser más caras a veces que sus competidoras, las han hecho ser las más exitosas por décadas y es una tendencia que parece no va a cambiar.
De todas las características de las bujías NGK, la que más destaca por sobre sus más cercanas competidoras, es la durabilidad de las mismas, puesto que aguantan más kilómetros y resisten mejor a los distintos esfuerzos a los que puede ser sometido el motor.
Su calidad de chispa y durabilidad hacen que no necesiten ser reemplazadas tan frecuentemente como ocurre a veces con las Bosch o Champion, las que pueden ser buenas, pero según especialistas del sector algo menos duraderas en el tiempo.
Las bujías NGK atacan de forma transversal una gran gama de motores, estando disponibles para distintos segmentos del rubro automotriz.
Revisa el historial mecánico y legal de un vehículo usado. Revisa sus revisiones técnicas, si ha sido chocado, permisos de circulación, kilometraje y deudas TAG, multas de tránsito y más