Incluso manejando a la defensiva podrías tener que frenar bruscamente. A diario miles de personas en Chile conducen, sea para ir al trabajo, a la universidad, a comprar o simplemente por viajes de placer.
En este sentido, los riesgos de choque están siempre, solo que en algunos contextos es más peligroso que en otros. Todo va a depender de la velocidad con la que conduzcas, tu capacidad de reacción y cuán atento estás a las condiciones del tránsito.
Dicho lo anterior, gracias a información provista por el Libro del Nuevo Conductor, te queremos enumerar varias situaciones en donde tendrías que frenar bruscamente. Más adelante te daremos algunos consejos para frenar mejor.
Revisa si un auto usado que quieres comprar ha tenido arreglos en concesionarias o choques con el Informe Autofact.
En la ciudad es donde más posibilidades tienes de frenar bruscamente, pero al mismo tiempo es menos peligroso que en carretera, en la que se circula al doble de velocidad que en zonas urbanas. De esta forma, podrías tener que frenar bruscamente cuando:
Por todas estas razones, te recomendamos estar siempre muy atento a las condiciones del tránsito, conducir a la defensiva, a respetar los límites de velocidad y nunca distraerte con elementos como el celular o la radio, pues cada segundo cuenta en tu reacción al frenar.
En carretera vas a mayor velocidad, pero como son normalmente menos transitadas que la ciudad, las posibilidades de una frenada brusca son algo menores. Eso sí, debes tener presente que son más peligrosas, ya que a mayor velocidad las distancias de frenado son mayores y es más fácil perder el control del vehículo.
En carretera podrías frenar brusco cuando:
Como ya viste, te mostramos varias circunstancias en las que podrías tener que frenar bruscamente. Por tal razón, te queremos dejar algunas recomendaciones para que tus frenadas se alejen lo máximo posible del riesgo.
Sabiendo que hay que evitar frenadas bruscas en todo momento, la técnica de frenado posee ciertas variaciones dependiendo si tiene frenos ABS o no.
Siempre es mejor evitar las frenadas bruscas; pues se entiende que son maniobras de emergencia cuando no hay nada más que hacer. En todas las frenadas bruscas es bueno mirar también por el retrovisor, puesto que podrías eventualmente esquivar al auto que viene detrás de ti; también podrías regular la intensidad de la frenada dependiendo de si viene alguien atrás o no.
Además, cuida la distancia con el auto que está en frente de ti, para que puedas tener capacidad de reacción si es que ese vehículo frena repentinamente.
Siempre maneja a la defensiva y haz la mantención preventiva de tus frenos, puesto que, si no lo haces, comenzarán a frenar menos. En ese sentido, si tienes los frenos malos y te sorprenden, te pasarán un parte de carácter grave.
Podría pasar que te quedes sin frenos; o sea, pisas el pedal y se va hasta el fondo sin oponer resistencia. Si ocurre te dejamos los siguientes consejos; los que debes considerar en orden. Es decir, si no funciona la primera maniobra, pasa a la segunda y así hasta que puedas controlar la maniobra.
Revisa si un auto usado que quieres comprar ha tenido arreglos en concesionarias o choques con el Informe Autofact.