Al conducir, las condiciones climáticas son un factor muy importante, pues pueden influir de manera significativa en la seguridad de las vías.
Ante ello, todo conductor debe saber que, no es lo mismo conducir sobre un pavimento seco que sobre uno mojado. Así como tampoco es lo mismo cruzar en el auto un camino con neblina. Es decir, las condiciones climáticas modifican el tipo de conducción.
Esto forma parte de los conocimientos que se deben tener para conseguir la licencia de conducir. Entre los aspectos que pueden verse afectados por condiciones climáticas adversas, como la lluvia, se encuentran:
Por situaciones así, se ven aumentados los riesgos de tener un accidente de tránsito, por lo que se deben tomar las precauciones correspondientes y saber muy bien cómo manejar con lluvia.
Revisa si un auto tiene sus revisiones técnicas al día, si ha sido chocado, si tiene multas sin pagar, deudas TAG y otros antecedentes legales y mecánicos.
De acuerdo con el Libro del Nuevo Conductor, “es con las primeras gotas de lluvia cuando más precauciones hay que tomar, porque al mezclarse el agua con el polvo o el aceite que se encuentra en el asfalto, la calzada se torna muy resbaladiza, sobre todo, cuando llueve tras un largo período en que no ha habido lluvia”.
Estas condiciones peligrosas para manejar se traducen en accidentes de tránsito, que aumentan un 34% cuando llueve, según el medio 24 horas.
Por ello, si vas a manejar con lluvia, o con el pavimento mojado tras la lluvia, asegúrate de tomar las siguientes precauciones:
Antes de salir a conducir, asegúrate de que tus neumáticos estén en buen estado. Estas son algunas cosas en las que tienes que fijarte:
Esto no debiera ser tanto problema si es que tu auto se encuentran con sus mantenimientos preventivos y correctivos al día, elementos fundamentales para mantener la seguridad de la conducción.
Por lo demás, circular con los neumáticos en mal estado es una infracción de tránsito grave, cuya multa va de 1 a 1,5 UTM, lo que en agosto de 2024 equivale a un monto entre $65.901 y $98.852.
Si está lloviendo, enciende las luces bajas, aun cuando sea de día, para aumentar tu visibilidad y permitir que otros vehículos te vean con mayor facilidad.
Es muy importante que evites usar las luces altas, ya que pueden reflejarse en el agua y empeorar la visibilidad.
Cuando llueve, el parabrisas, los vidrios laterales, la luneta trasera y los espejos, se empañan, se ven cubiertos de gotas de agua o y/o se salpican de barrio.
De modo que, es crucial que mantengas limpios todos estos elementos. Para ello, puedes seguir estos consejos:
El agua en la carretera puede reducir el contacto entre los neumáticos y el asfalto, aumentando el riesgo de patinar. Por esta razón es tan importante que reduzcas la velocidad y mantengas una distancia mayor de lo habitual con el vehículo de adelante, así tendrás más tiempo de reacción en caso de emergencia.
Como te comentamos en el punto anterior, la distancia de frenado aumenta en condiciones de lluvia, por lo que es fundamental mantener una distancia mayor con el vehículo de adelante. Esta, al menos, debe ser el doble que lo que sería en condiciones normales.
Mientras conduces bajo la lluvia, comprueba con frecuencia si tus frenos responden, porque al mojarse pierden eficacia y deberás “secarlos”.
El Libro del Nuevo Conductor indica que tienes que secar los frenos de esta forma: “sin ánimo de frenar, pise ligera y suavemente y en forma repetida, el pedal de freno (efecto bombeo)”.
Las maniobras bruscas en superficies mojadas pueden hacer que pierdas el control del vehículo. Por ello, al manejar con lluvia, acelera y frena suavemente para evitar el bloqueo de las ruedas y que el vehículo se deslice sobre ellas, como patinando.
Eso sí, lo anterior no se produce cuando el vehículo está equipado con frenos ABS, que actualmente es un elemento de seguridad obligatorio en el país que deben tener los autos desde fábrica.
Dentro de lo posible, debes evitar atravesar acumulaciones de agua, ya que pueden hacer que tu vehículo comience a deslizarse.
Pero, si no puedes evitar pasar por un charco de agua, entonces reduce la velocidad, soltando el acelerador gradualmente y manteniendo el volante recto, bien firme con ambas manos, sin hacer movimientos bruscos.
Manejar con lluvia es una actividad que requerirá de toda tu atención. Así como en condiciones normales, evita usar el celular, comer o cualquier actividad extra mientras conduces. Mantén las dos manos firmes en el volante y concéntrate en el camino.
Si sabes que va a llover, planifica tu viaje con anticipación. Sal con el tiempo suficiente para evitar conducir apurado y estresado, y considera rutas alternativas si las condiciones en tu recorrido habitual son peligrosas.
Te puedes informar sobre el estado de los caminos y de las autopistas concesionadas a través de redes sociales. Generalmente, las empresas concesionarias entregan estos datos a través de Twitter.
Así también, las redes sociales de las municipalidades, como Instagram, también suelen brindar esta información.
En el Libro del Nuevo Conductor, en el apartado sobre conducir con lluvia, se menciona el concepto de Aquaplaning o Hidroplaning, que ocurre cuando la lluvia es muy intensa y se forma una capa de agua en la calzada.
Esta capa de agua puede producir la acumulación de agua en las ruedas, por lo que se pierde adherencia y contacto con la superficie de la calzada y el vehículo se desliza, como flotando, de forma que el conductor pierde el control del auto.
Si te ocurre esto, mientras mayor sea tu velocidad, mayor será la cantidad de agua que los neumáticos deben desplazar, y más agua se acumulará. Ante esta situación, lo mejor es reducir la velocidad considerablemente.
En el caso de que debas atravesar en tu auto un terreno inundado, puedes seguir estos consejos:
El artículo 118 de la Ley de Tránsito indica lo siguiente: “En caso de haber agua en la calzada, el conductor cuidará que esta no moje la acera ni a los peatones o conductores de ciclos”.
Y el artículo 201 lo califica como una infracción de tránsito menos grave, por lo que si mojas a un peatón mientras conduces, arriesgas una multa que puede ir de 0,5 a 1 UTM, es decir, de $32.951 a $65.901, de acuerdo con el valor de la UTM de agosto de 2024.
Revisa si un auto tiene sus revisiones técnicas al día, si ha sido chocado, si tiene multas sin pagar, deudas TAG y otros antecedentes legales y mecánicos.