Sin afanes de hacer publicidad, muchos de nosotros probablemente cuando escuchamos la frase “cera para auto” se nos viene inmediatamente la clásica cera Kit, que aún está disponible en varios mercados a nivel mundial.
O por qué no, podemos recordar las clases del Señor Miyagi en Karate Kid, donde encerar un auto de manera correcta fue el mejor entrenamiento para formar a un buen karateca.
Si bien tiene fines casi puramente estéticos, de igual forma tiene su importancia. Una carrocería bien mantenida será bien valorada a la hora de querer vender el auto, por ejemplo.
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Así es, el encerado de un auto mejora su estética, dejándolo con la pintura más brillante, resaltando sus líneas de diseño y acabado. Al mismo tiempo una buena cera protege a la pintura de los rayos del sol, de la lluvia y de algún polvo en suspensión en el ambiente.
Además, un buen encerado facilita limpiar el auto, pues impide que la suciedad se fije mucho a la pintura, quedando más fijada en la capa de cera. Si usas cera para el auto, es bueno hacerlo seguido, de manera que la protección sea más permanente.
Además de cuidar la pintura, una buena cera mejorará la presentación de tu vehículo; atraerá las miradas y porqué no alguien que valore lo bien cuidado que está, eventualmente querrá darte un buen monto a cambio de él.
El mercado de la estética del auto ha existido siempre y nunca dejará de estarlo. Es más, cuanto más avanza la industria, más importante se torna la estética de cada vehículo, en muchos casos, por sobre accesorios de confort o motorización.
Para cuidar la pintura, el brillo y el color del auto hay varios tipos de ceras, según bolsillo, necesidades y expectativas.
Tienen más duración en el tiempo y más protección también. Están fabricadas con solventes y aceites que sellan la pintura del auto. Sirven mucho para tonos claros de vehículo.
Este tipo de ceras contiene Carnauba, ingrediente que viene de las hojas de una planta brasilera llamada Copernicia Prunifera. Este tipo de ceras es más efectiva mientras más Carnauba tenga en su composición. Lamentablemente no es fácil de conseguir, ni tampoco barata.
Pueden ser de composición natural o sintética. Suele venir en spray, siendo de fácil aplicación, preferida por varios. Eso sí, hay que encerar bien para que la película no sea demasiado fina.
Logra lo mismo que la cera líquida, pero con una aplicación más compleja debido a su textura. En estos casos es ideal tener una enceradora especial para abrillantar con cera en pasta o bien entrenar como Karate Kid.
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